Un patio es como un gran parque de juegos justo al lado de tu casa. Es donde puedes correr, saltar y jugar con tus juguetes. Piensa en él como tu propio espacio natural donde puedes observar los pájaros, ver las flores florecer y tal vez incluso encontrar algunos insectos. Es un lugar especial que está afuera pero que aún se siente como si te perteneciera.
Imagina el patio como un enorme lienzo donde puedes crear tus propias aventuras. Puedes ser un pirata buscando tesoros o un científico descubriendo nuevas plantas. El césped es como una alfombra verde suave donde puedes sentarte y hacer un picnic con tus ositos de peluche. Cuando el sol brilla, el patio se convierte en un lugar cálido y feliz para pasar el tiempo.
A veces, el patio es como un pequeño zoológico. Podrías ver ardillas corriendo o escuchar pájaros cantando en los árboles. Si tienes suerte, incluso podrías ver un conejo saltando. Es un lugar lleno de pequeñas sorpresas y cosas divertidas para explorar. El patio es tu propio reino al aire libre donde puedes imaginar y jugar todo el día.