desperdicio
El desperdicio es como cuando tienes una gran caja de crayones y solo usas un color, dejando el resto sin usar. El desperdicio ocurre cuando las cosas que podrían usarse se tiran o no se usan en absoluto. Imagina que tienes un delicioso sándwich y solo comes un pequeño bocado, tirando el resto. Eso es desperdicio porque el sándwich podría haber sido comido por otra persona o guardado para más tarde.
Piensa en el desperdicio como un juguete con el que ya no juegas. Simplemente se queda en la esquina, acumulando polvo. Cuando no usamos algo, se convierte en desperdicio. Es como cuando viertes demasiada leche en tu tazón de cereal y no puedes terminarla. La leche que se vierte en el fregadero se desperdicia.
El desperdicio también es como cuando dejas las luces encendidas en una habitación después de salir. La electricidad se está usando, pero nadie está allí para disfrutar de la luz. Por lo tanto, es importante usar solo lo que necesitas y guardar el resto para cuando lo necesites más tarde. Al hacer esto, podemos ayudar a cuidar nuestro mundo y asegurarnos de que haya suficiente para todos.