Cuando algo se describe como virgen, significa que es completamente nuevo o intacto. Piensa en una nieve recién caída. Es lisa, pura, y nadie ha caminado sobre ella todavía. La nieve es como un lienzo en blanco, esperando las primeras huellas. Esto es como ser virgen, donde algo está intacto y en su estado original.
Otra forma de verlo es como una hoja de papel en blanco. Antes de que alguien dibuje o escriba en ella, el papel está intacto y perfecto. Una vez que empiezas a dibujar, cambia, pero antes de eso, es como una hoja de papel virgen, lista para cualquier cosa.
Por último, piensa en un juguete nuevo que aún no ha sido jugado. Está todavía en su caja, brillante y perfecto. Una vez que lo abres y empiezas a jugar, ya no es nuevo. Pero antes de eso, es como un juguete virgen, esperando ser disfrutado por primera vez.