Un vehículo es como una alfombra mágica que ayuda a las personas a moverse de un lugar a otro. Así como te subes a tu caballo de juguete y finges galopar, un vehículo te permite viajar lejos sin usar tus propios pies. Puede ser un coche, que es como una pequeña habitación acogedora sobre ruedas donde tu familia puede sentarse junta y ir al parque o la tienda.

Imagina que un autobús es una gran oruga amigable que lleva a muchas personas. Se detiene en lugares para dejar que las personas suban y bajen, al igual que una oruga se mueve de hoja en hoja. Un tren es como una larga serpiente que se desliza por las vías, llevando a la gente por ciudades y campos sin detenerse en los semáforos.

Un avión es como un gran pájaro que vuela en el cielo, llevándote a lugares lejanos muy rápidamente. Y una bicicleta es como un amigo de aventuras de dos ruedas que puedes pedalear para que avance, sintiendo el viento en tu cara. Todos estos vehículos son herramientas especiales que nos ayudan a explorar el mundo, haciendo que los viajes sean divertidos y emocionantes.