La transmisión es como un puente mágico que ayuda a las cosas a moverse de un lugar a otro. Imagina que tienes un puente especial que te permite enviar juguetes desde tu habitación a la casa de tu amigo. Este puente es muy útil porque asegura que los juguetes lleguen de manera segura.
Otra forma de pensar en la transmisión es como un cartero súper rápido. Cuando quieres enviar una carta a alguien, el cartero la toma de tu casa y la entrega en la casa de tu amigo. La transmisión funciona de la misma manera, pero en lugar de cartas, puede enviar cosas como sonidos, imágenes o incluso ideas.
La transmisión también se puede comparar con un juego de susurros. Cuando le susurras un secreto a tu amigo, y él se lo susurra a otro amigo, el mensaje viaja de persona a persona. La transmisión ayuda a que los mensajes y la información viajen rápidamente y con claridad, para que todos conozcan el secreto.
Piensa en la transmisión como un equipo de ayudantes. Cada ayudante tiene un trabajo que hacer, como llevar una pieza de un rompecabezas. Cuando todos los ayudantes trabajan juntos, se aseguran de que todo el rompecabezas llegue al lugar correcto, al igual que la transmisión envía todas las partes de un mensaje a donde necesitan ir.