Un teórico es como una persona que ama resolver rompecabezas, pero en lugar de usar piezas de rompecabezas, usan ideas. Piensan en cómo funciona el mundo y tratan de entenderlo mejor. Imagina que estás tratando de averiguar por qué el cielo es azul o por qué los pájaros pueden volar. Un teórico propondría diferentes explicaciones, como cómo la luz del sol se dispersa en el cielo o cómo los pájaros tienen alas especiales.
Piensa en un teórico como un narrador que utiliza la ciencia o las matemáticas para contar historias sobre el mundo. Puede que no tengan todas las respuestas de inmediato, pero usan su imaginación y conocimiento para proponer teorías. Estas teorías son como historias que nos ayudan a entender grandes preguntas, como por qué las estrellas titilan o cómo crecen las plantas.
Un teórico también es como un detective. Así como un detective busca pistas para resolver un misterio, un teórico busca pistas en el mundo que nos rodea. Hacen muchas preguntas y usan lo que aprenden para resolver grandes misterios, como cómo la gravedad hace que las cosas caigan o por qué tenemos estaciones.