Un adolescente es como una oruga que se convierte en mariposa. Cuando alguien es adolescente, está en un momento especial de la vida donde está creciendo y cambiando mucho, al igual que una oruga crece y se transforma en una hermosa mariposa. Durante este tiempo, los adolescentes comienzan a parecerse más a los adultos, pero aún no lo son completamente. Están aprendiendo cosas nuevas sobre sí mismos y el mundo que los rodea, como una mariposa aprendiendo a volar.
Otra forma de pensar en un adolescente es como un árbol joven. Cuando un árbol es joven, necesita mucho cuidado y atención para crecer fuerte y alto. Los adolescentes son como estos árboles jóvenes porque están creciendo en sus mentes y cuerpos. Necesitan ayuda de su familia, maestros y amigos para aprender y tomar buenas decisiones.
También puedes imaginar a un adolescente como un superhéroe en entrenamiento. Están descubriendo sus poderes y habilidades únicas, tratando de entender cómo usarlos para el bien. Así como los superhéroes necesitan practicar y aprender, los adolescentes están descubriendo qué los hace especiales y cómo pueden ayudar a los demás.