Un tanque es como una caja grande y fuerte sobre ruedas, pero no es cualquier caja. ¡Imagina si tu coche de juguete pudiera convertirse en un superhéroe! Puede moverse por caminos llenos de baches, a través del barro, e incluso subir pequeñas colinas. El tanque tiene grandes ruedas redondas llamadas orugas que le ayudan a rodar sobre casi cualquier cosa.

Piensa en un tanque como una tortuga gigante. La tortuga tiene un caparazón duro para protegerse, y el tanque también. Este caparazón está hecho de metal resistente para mantener a las personas dentro seguras, al igual que el caparazón de la tortuga la protege del daño.

Un tanque es también como un caballero fuerte. En los cuentos de hadas, los caballeros llevan armadura para protegerse y tienen espadas para luchar. El tanque también lleva armadura, y tiene un tubo largo llamado cañón que puede disparar cosas a lo lejos, como la espada de un caballero.

Imagina un tanque como un gran fuerte en movimiento. Dentro, hay personas que trabajan juntas como un equipo. Conducen el tanque, vigilan las cosas y se aseguran de que vaya a donde necesita ir. Al igual que en un fuerte, todos tienen un trabajo importante que hacer.