Una maleta es como una gran caja especial que puedes llevar contigo cuando vas de viaje. Imagina que tienes un juguete favorito o ropa que quieres llevar cuando visitas la casa de la abuela. Los pones dentro de la maleta, la cierras, y luego puedes rodarla o llevarla a donde vayas. Es como un armario portátil que mantiene tus cosas seguras y ordenadas.
Piensa en ella como un cofre del tesoro para tus aventuras. Así como los piratas guardan su oro en un cofre, tú guardas tus cosas importantes en una maleta. Cuando vas de viaje, abres la maleta, decides qué quieres llevar y lo metes dentro. Cuando llegas a tu destino, la abres de nuevo y todo lo que necesitas está ahí.
Una maleta también puede ser como una gran caja de almuerzo para tu ropa y juguetes. ¿Sabes cómo una caja de almuerzo mantiene tu sándwich y bocadillos en un solo lugar? Una maleta hace lo mismo pero para tu ropa, zapatos y juguetes. Tiene un asa, así que puedes tirar de ella, y a veces incluso tiene ruedas, así que rueda fácilmente como un cochecito de juguete.