La lucha es como cuando intentas trepar a un árbol grande y alto. Puedes sentir que tus brazos se cansan, tus manos resbalan y, a veces, incluso te caes. Pero sigues intentándolo porque quieres llegar a la cima. Esto es lo que significa luchar. Se trata de trabajar muy duro, incluso cuando es difícil, para llegar a donde quieres estar.
Piensa en la lucha como un rompecabezas con muchas piezas. Al principio, parece confuso y no sabes por dónde empezar. Puedes poner una pieza en el lugar equivocado, pero sigues intentando diferentes lugares hasta que encaje. Esto es una lucha, pero también es una forma de aprender y mejorar.
Luchar es como cuando estás aprendiendo a andar en bicicleta. Al principio, puedes tambalearte y caerte, pero sigues volviendo a la bicicleta. Cada vez que lo intentas, aprendes a equilibrarte mejor. Aunque es difícil, sigues adelante porque quieres andar con suavidad. Luchar es no rendirse, incluso cuando las cosas son difíciles.