Cuando coses algo, es como usar un hilo mágico para mantener juntas dos piezas de tela. Tienes dos hojas de papel y quieres que se queden juntas. Podrías usar pegamento, pero cuando coses, usas una aguja e hilo, como dibujar una línea que las mantiene conectadas. La aguja es como un pequeño ayudante que guía el hilo a través de la tela, haciendo pequeños bucles que lo mantienen todo apretado.
Piensa en coser como dar un abrazo a dos piezas de tela. El hilo se envuelve alrededor de ellas, acercándolas para que no se separen. Cada puntada es como un pequeño abrazo que evita que la tela se despida. Si miras de cerca, puedes ver el hilo haciendo un pequeño camino, como una vía de tren, a través de la tela.
Coser es también como hacer una pulsera de amistad. Tomas hilos de colores y los entrelazas para crear algo hermoso y fuerte. Cada puntada es como un nudo en la pulsera, asegurándose de que se mantenga unida, incluso si la usas todos los días. Es una forma de hacer que las cosas duren y se vean bonitas.