Un palo es como una varita mágica que encuentras afuera. Es un trozo de árbol que ha caído al suelo. Puedes usarlo para dibujar en la tierra, como dibujar con un crayón en papel. Los palos pueden ser grandes o pequeños, rectos o curvos, y vienen en diferentes colores, al igual que los crayones en una caja.
Piensa en un palo como un puente para las hormigas. Cuando las hormigas ven un palo, lo usan para cruzar de un lugar a otro, al igual que nosotros usamos un puente para cruzar un río. El palo les ayuda a llegar al otro lado de manera segura.
Un palo es también como una espada para los caballeros en un cuento de hadas. Cuando sostienes un palo, puedes fingir ser un valiente caballero luchando contra dragones. Se siente fuerte en tu mano y te ayuda a imaginar todo tipo de aventuras.
A veces, los palos son como bloques de construcción para los pájaros. Los pájaros recogen palos para hacer sus nidos, al igual que tú usas bloques para construir una torre. Colocan cuidadosamente cada palo para crear un hogar acogedor para sus pajaritos.