Piensa en un espectro como un arcoíris. Cuando el sol brilla a través de la lluvia, ves diferentes colores como rojo, naranja, amarillo, verde, azul y púrpura. Estos colores son todos parte del espectro de luz. Es como un puente mágico que nos muestra todos los colores que la luz puede ser.
Otra forma de pensar en un espectro es como un piano musical. Cada tecla del piano produce un sonido diferente, al igual que cada color del arcoíris es diferente. Cuando tocas todas las teclas de un extremo al otro, escuchas una gama de notas, que es similar a ver todos los colores en el espectro.
Un espectro también puede ser como una caja de crayones. Cuando abres la caja, ves crayones de muchos colores diferentes. Puedes usarlos para dibujar un cuadro con muchos tonos y matices diferentes. Al igual que los crayones, un espectro nos muestra todas las diferentes posibilidades de colores y sonidos que podemos ver o escuchar.