Ser social es como ser parte de un gran rompecabezas feliz. Cada persona es una pieza, y cuando todos nos juntamos, hacemos una imagen hermosa. Al igual que las piezas de un rompecabezas, todos encajamos de diferentes maneras, y cuando hablamos, jugamos y compartimos, creamos algo especial.
Piensa en social como un jardín. En este jardín, cada persona es un tipo diferente de flor. Algunas son altas, otras pequeñas y algunas son coloridas. Cuando somos sociales, nos ayudamos a crecer siendo amables, compartiendo sonrisas y escuchando. Juntos, hacemos que el jardín sea brillante y lleno de vida.
Ser social también es como un equipo jugando un juego. Cada jugador tiene un papel, y juntos, hacen que el juego sea divertido y emocionante. Cuando somos sociales, nos animamos unos a otros, ayudamos cuando alguien cae y celebramos cuando lo hacemos bien. Se trata de trabajar juntos y ser felices con amigos.
En una historia, ser social significa que todos somos personajes en una gran aventura. Hablamos, reímos y aprendemos unos de otros, haciendo que la historia sea más interesante y divertida. La historia de cada persona se suma a la aventura, y juntos, hacemos la mejor historia de todas.