Cuando ‘hueles’, es como ser un detective con tu nariz. Imagina que tu nariz es una herramienta especial que te ayuda a descubrir cosas a tu alrededor. Cuando tomas una gran inhalación, estás usando tu nariz para descubrir qué está pasando. Es como cuando ves una flor y tu nariz te ayuda a saber que huele dulce.
Oler también es como una pequeña aspiradora en tu nariz. Cuando hueles, tu nariz aspira el aire, y con él, todos los pequeños olores que flotan. Esto te ayuda a saber si hay comida deliciosa cerca o si algo huele raro. ¡Tu nariz es como un superhéroe con el poder de oler!
Otra forma de pensar en oler es como un perro amistoso que usa su nariz para explorar el mundo. Al igual que un perro huele para aprender sobre todo, tú haces lo mismo. Tu nariz te ayuda a entender el mundo al recolectar todos los diferentes olores, como galletas horneándose o lluvia fresca. Oler es la forma en que tu nariz dice ‘¡Hola!’ a todos los olores a tu alrededor.