Piensa en un lado como una línea en un papel. Si dibujas un cuadrado, tiene cuatro líneas, o lados. Cada lado es como una pared que ayuda a formar la forma. Ahora, imagina un bloque de juguete. Cada parte plana que tocas es un lado. Estos lados hacen que el bloque parezca una caja.
Cuando miras un libro, la portada es un lado, y la contraportada es otro lado. Los lados ayudan a mantener todas las páginas juntas, al igual que los lados de una casa sostienen el techo.
En un juego de escondite, si te escondes detrás de un árbol, estás en un lado del árbol, y tu amigo que te busca está en el otro lado. Los lados nos ayudan a saber dónde están las cosas.
Incluso cuando comes un sándwich, tienes dos lados: el pan superior y el pan inferior. Mantienen todas las cosas deliciosas dentro.
Así que, un lado es como una parte de algo que ayuda a hacerlo completo, como una pieza de un rompecabezas o una rebanada de pastel que se ajusta con otras rebanadas para hacer un pastel completo.