choque
Cuando tocas algo muy frío o muy caliente, y hace que tu mano se sienta rara y te hagas para atrás, eso es un poco como un choque. Es como cuando recibes una pequeña sorpresa, y tu cuerpo dice: ‘¡Vaya, qué fue eso?’ Tu corazón puede latir un poco más rápido y puedes sentirte un poco nervioso.
Piensa en un muñeco de resorte. Giras la manivela y sabes que algo va a salir, pero cuando lo hace, todavía te sorprendes. Eso es similar a cómo se siente un choque; puede tomarte por sorpresa incluso si lo esperas.
O imagina escuchar un fuerte bang cuando todo está en silencio. Te hace sentir un poco asustado y sorprendido al mismo tiempo. Tus ojos pueden abrirse mucho y puedes sentir que quieres correr. Esto es porque tu cuerpo está tratando de protegerte de algo inesperado.
Así que un choque es como una pequeña sorpresa que hace que tu cuerpo reaccione rápidamente, al igual que cuando tocas una estufa caliente o escuchas un ruido fuerte. Es la manera de tu cuerpo de mantenerte a salvo.