Un vendedor es como un ayudante amable que habla con la gente sobre cosas que podrían querer o necesitar. Imagina a alguien que le encanta contar historias sobre juguetes, libros o incluso aperitivos deliciosos. Esta persona ayuda a los demás a entender por qué estas cosas son especiales y cómo pueden mejorar su día. Como cuando le cuentas a tus amigos sobre tu juguete favorito, un vendedor comparte detalles emocionantes para interesar a los demás.
Piensa en un vendedor como un puente entre las personas y las cosas que podrían gustarles. Escuchan lo que la gente quiere, como cuando escuchas el juego favorito de tu amigo, y luego sugieren algo que podría ser perfecto para ellos. ¡Es un poco como ser un casamentero, pero para cosas en lugar de personas!
Un vendedor también es como un guía en una tienda, mostrando a la gente dónde encontrar lo que buscan. Si alguien se siente perdido o inseguro, el vendedor les ayuda a encontrar su camino, haciendo que las compras sean divertidas y fáciles. Es como tener un mapa que lleva a tesoros, con el vendedor siendo el guía útil que conoce todos los mejores lugares.