La redundancia es como tener dos ositos de peluche que se ven exactamente iguales. Si uno de los ositos se pierde, todavía tienes el otro para abrazar. Redundancia significa tener algo extra, por si acaso lo necesitas más tarde.
Piensa en un plan de respaldo. Si quieres dibujar un cuadro y tu crayón favorito se rompe, tienes otro crayón que puede hacer el mismo trabajo. De esta manera, puedes seguir dibujando sin detenerte. Tener un respaldo significa que estás preparado para sorpresas.
Imagina un cono de helado de doble bola. Si una bola se cae, todavía tienes otra bola para disfrutar. La redundancia es como tener una bola extra, por si algo inesperado sucede.
Considera una llanta de repuesto en un coche. Si una llanta se pincha, la llanta de repuesto ayuda a que el coche siga moviéndose. La redundancia es como tener una llanta de repuesto, para que no tengas que detener tu viaje.
Imagina una red de seguridad bajo un trapecista. Si se caen, la red los atrapa. La redundancia es como una red de seguridad, proporcionando seguridad adicional cuando las cosas no salen como se planean.