Cuando ocurre una recesión, es como si tu caja de juguetes tuviera menos juguetes para jugar. Todos quieren jugar, pero no hay suficientes juguetes para todos, así que algunos niños pueden sentirse tristes porque no pueden encontrar un juguete para jugar. Esto significa que las personas no tienen tanto dinero para comprar cosas, y a veces, las personas pueden perder sus trabajos, lo cual es como no poder ir al parque tan a menudo.
Piensa en una recesión como un momento en que el gran tarro de galletas está casi vacío. Normalmente, hay muchas galletas para todos, pero durante una recesión, hay menos galletas. Las familias tienen que compartir lo que tienen y no pueden obtener más galletas de inmediato. Esto significa que las personas tienen que tener cuidado con cuántas galletas comen y cuántas comparten con los amigos.
Imagina un gran jardín donde todos cultivan plantas. Durante una recesión, es como si las plantas no crecieran tan rápido. Las personas tienen que esperar más tiempo para las frutas y verduras, y tienen que asegurarse de usar lo que tienen sabiamente hasta que el jardín comience a crecer nuevamente.