Sentirse orgulloso es como cuando construyes una torre grande y colorida con tus bloques y te sientes realmente feliz y emocionado porque lo hiciste tú solo. Es esa sensación cálida y soleada dentro de tu corazón que te hace querer mostrarle a todos lo que hiciste porque trabajaste duro y salió genial.
Imagina que tienes un dibujo favorito que hiciste. Usaste todos tus colores favoritos y te tomaste tu tiempo para hacerlo perfecto. Cuando lo miras, sientes que tu corazón sonríe porque sabes que es algo especial que creaste. Ese sentimiento es el orgullo.
A veces, sentirse orgulloso es como tener una pequeña capa de superhéroe en tu espalda. Te hace pararte un poco más erguido y sentirte un poco más fuerte porque sabes que hiciste algo realmente bueno. Ya sea ayudando a un amigo, aprendiendo algo nuevo o terminando un rompecabezas, sentirse orgulloso es la forma en que tu corazón te da un gran abrazo cálido para decir ‘¡Bien hecho!’