El prejuicio es como cuando decides que no te gusta un libro solo por mirar su portada y no leer ninguna de las páginas de adentro. A veces, las personas se forman una opinión sobre otras personas sin conocerlas realmente, como juzgar un libro por su portada. Esto puede ser injusto porque podrías perderte una historia realmente buena o un amigo agradable. Prejuicio es una palabra grande que significa tomar una decisión sobre alguien o algo antes de conocer realmente todo al respecto.
Otra forma de pensar en el prejuicio es como cuando tienes un sabor de helado favorito y piensas que todos los demás sabores son feos sin probarlos. Podrías decir que el chocolate es el mejor y nunca probar la vainilla o la fresa. A veces las personas hacen esto con otras personas, pensando que saben todo sobre alguien solo por su apariencia o de dónde vienen. Pero al igual que con el helado, podrías encontrar algo realmente especial si lo pruebas primero.
Imagina tu caja de juguetes llena de diferentes juguetes. Si solo juegas con un juguete porque piensas que los demás no son divertidos, te estás perdiendo mucha diversión. El prejuicio es un poco así. Es decidir no jugar con ciertos juguetes sin darles una oportunidad. Cuando le das una oportunidad a todos los juguetes, podrías encontrar nuevos favoritos y divertirte más. Es importante recordar que todos y todo merecen una oportunidad de mostrar cómo son realmente.