La preferencia es como tener un favorito especial. Como cuando tienes una caja de crayones, y te encanta el rojo más que los demás. Tal vez porque hace que tus dibujos se vean brillantes y felices. Ese crayón rojo es tu preferencia. Es el que eliges primero porque te hace sentir bien.
Las preferencias pueden ser como elegir sabores de helado. Puede que te guste más el chocolate que la vainilla. Aunque ambos son deliciosos, el chocolate te hace sonreír más. ¡Esa es tu preferencia! Es como tener una pequeña voz en tu cabeza que dice, ‘Me gusta más este’.
Imagina que estás eligiendo un cuento para dormir. Tienes muchos libros, pero hay uno sobre un dragón valiente que siempre quieres escuchar. Esa es tu preferencia porque es la historia que te emociona y te hace feliz.
Las preferencias son como tener un mejor amigo. Tienes muchos amigos, pero hay uno con el que te gusta jugar más. ¡Esa es tu preferencia! Es lo que te hace sentir más feliz.
Entonces, una preferencia es simplemente lo que más te gusta, lo que te hace sentir mejor por dentro.