Un intérprete es como un superhéroe que sube a un escenario especial para mostrar sus increíbles poderes, como cantar, bailar o actuar. Cuando están en el escenario, usan disfraces coloridos y utilizan sus voces o cuerpos para contar historias que hacen que la gente se sienta feliz, emocionada o incluso un poco triste. Al igual que un mago que te hace creer en la magia, un intérprete te hace sentir como si estuvieras en un mundo diferente por un rato.
Piensa en un intérprete como un pintor, pero en lugar de usar un pincel y colores, usan sus expresiones y movimientos para pintar cuadros en tu mente. Pueden hacerte reír como una pluma que hace cosquillas o llorar como una suave lluvia, todo con solo una sonrisa o una lágrima. Su trabajo es hacerte sentir algo especial, y lo hacen con mucha práctica y amor por lo que hacen.
Imagina un narrador que no usa un libro. Un intérprete cuenta historias con todo su cuerpo, como un dibujo animado viviente. Pueden ser cualquier persona o cosa, desde un valiente caballero hasta un payaso tonto. Su trabajo es llevarte a una aventura sin que tengas que levantarte de tu asiento. Así que, un intérprete es alguien que comparte su corazón con el público, haciendo de cada espectáculo un viaje inolvidable.