El ritmo es como la velocidad de un coche de juguete. Cuando lo empujas suavemente, se mueve despacio, y cuando lo empujas fuerte, va rápido. Así es el ritmo, es qué tan rápido o lento sucede algo. Si caminas despacio, tu ritmo es lento, y si corres, tu ritmo es rápido.
Piensa en el ritmo como el compás de una canción. Algunas canciones tienen un compás lento y relajante que te hace sentir tranquilo, mientras que otras tienen un compás rápido y emocionante que te hace querer bailar. El ritmo es como el compás de lo que haces, ya sea caminar, correr o incluso leer un cuento.
Imagina un tren en las vías. Cuando el tren se mueve despacio, tarda mucho en llegar a la estación. Pero cuando se mueve rápido, llega rápidamente. El ritmo es como la rapidez o lentitud con la que el tren se mueve en su viaje. Ya sea que estés jugando, trabajando o incluso comiendo, tu ritmo puede cambiar, al igual que el tren.
El ritmo también puede ser como el latido del corazón de una persona. Cuando estás descansando, tu corazón late despacio, y cuando juegas o corres, late más rápido. El ritmo es como el latido del corazón de las actividades, cambiando con la energía que usas.