Cuando te opones a algo, es como cuando tú y tu amigo quieren jugar a juegos diferentes. Tú quieres jugar con bloques, pero tu amigo quiere jugar con coches. Ambos están tirando en direcciones diferentes, como un tira y afloja, porque no están de acuerdo en qué jugar.
Piensa en un imán. Cuando intentas juntar dos imanes con los mismos lados enfrentados, se repelen. Esa repulsión es como oponerse. Los imanes no quieren estar juntos de esa manera, al igual que cuando tienes ideas diferentes de alguien más.
Imagina el sol y la luna. Ambos están en el cielo, pero salen en momentos diferentes. El sol brilla durante el día y la luna brilla por la noche. Son como opuestos porque no aparecen juntos en el cielo al mismo tiempo. Oponerse es ser diferente o no coincidir con la idea o el plan de otra persona.