La ópera es como un gran libro de cuentos donde las personas cantan en lugar de hablar. Imagina tu cuento favorito antes de dormir, pero en lugar de solo leerlo, los personajes cobran vida y cantan sus sentimientos y aventuras. Los cantantes usan trajes elegantes, como si se disfrazaran para Halloween, para convertirse en los personajes de la historia.
Piensa en la ópera como un parque de juegos musical. En este parque, los cantantes usan sus voces como instrumentos musicales para contar historias. A veces cantan fuerte como un león rugiendo, y otras veces suavemente como un gatito ronroneando. La música ayuda a mostrar cómo se sienten los personajes, si están felices, tristes o emocionados.
La ópera es también como una gran pintura colorida. El escenario está lleno de luces brillantes y colores, y hay muchas personas trabajando juntas para que todo se vea hermoso. Hay músicos tocando instrumentos, bailarines moviéndose con gracia, y cantantes contando la historia con sus voces. Es un gran esfuerzo de equipo para crear algo mágico que todos puedan disfrutar.