roble
Un roble es como un gran paraguas hecho de madera y hojas. Proporciona sombra para mantenerte fresco en los días soleados, al igual que un paraguas te mantiene seco cuando llueve. Los robles son grandes y fuertes, y pueden vivir durante mucho tiempo, ¡incluso más que tus abuelos! Tienen ramas gruesas y retorcidas que se extienden como brazos, y sus hojas son como pequeñas manos verdes que saludan al viento.
Piensa en un roble como un viejo amigo sabio en el bosque. Se erige alto y cuida de los animales, como ardillas y pájaros, que lo usan como su hogar. Las bellotas, que son las semillas del roble, son como pequeños cofres del tesoro. A las ardillas les encanta recogerlas y esconderlas para más tarde.
Imagina el roble como un viajero en el tiempo. Ha visto muchas estaciones pasar, desde los inviernos nevados hasta los veranos cálidos y soleados. Cada año, crece un poco más, añadiendo anillos dentro de su tronco como un libro que añade páginas a su historia. Estos anillos pueden decirnos cuántos años tiene el roble y qué tipo de clima ha experimentado.