Sentirse nervioso es como tener un montón de mariposas revoloteando en tu barriga. Estas mariposas te hacen sentir un poco saltón y inquieto. Es como cuando estás a punto de bajar por un gran tobogán en el parque. Te sientes emocionado pero también un poco asustado porque no sabes exactamente cómo se sentirá al bajar.

Otra forma de entender estar nervioso es como tener una pelota rebotando dentro de ti. Esta pelota hace que tu corazón lata más rápido, como si estuviera tocando un juego rápido de tambores. Tus manos pueden ponerse un poco sudorosas, y tu estómago puede sentir que está haciendo volteretas. Es la forma en que tu cuerpo se prepara para algo nuevo o importante.

A veces, estar nervioso es como una nube cubriendo el sol. Hace que todo parezca un poco más oscuro e incierto. Pero recuerda, las nubes pueden moverse y el sol puede brillar de nuevo. Los sentimientos de nerviosismo también pueden desaparecer, especialmente cuando respiras profundamente y piensas en cosas felices. Está bien sentirse nervioso porque significa que estás a punto de hacer algo especial.