Un minero es como un cazador de tesoros, pero en lugar de buscar oro o joyas, busca bloques especiales llamados bloques de criptomonedas. Estos bloques son como cajas mágicas que contienen números secretos, y el trabajo del minero es encontrar estos números usando herramientas especiales llamadas computadoras. Cuando encuentran el número correcto, desbloquean la caja y obtienen una recompensa, que es como obtener una moneda de oro brillante llamada Bitcoin.

Piensa en un minero como un solucionador de rompecabezas. Cada bloque de criptomoneda es un gran rompecabezas complicado. El minero usa su computadora para probar diferentes piezas hasta encontrar la que encaja perfectamente. Una vez que resuelven el rompecabezas, gritan ‘¡Eureka!’ y reciben un premio. Este premio es un nuevo Bitcoin, un tipo especial de dinero que vive en internet.

Imagina al minero como una abeja ocupada en una colmena. La colmena es una red de computadoras, y cada abeja minera trabaja duro para encontrar néctar, que es como los números secretos en los bloques. Cuando encuentran el néctar, lo llevan de regreso a la colmena y hacen miel dulce, que es como crear nuevos Bitcoins. Cuanto más néctar encuentran, más miel producen, ¡y todos en la colmena celebran!