Una máscara es como una capa de superhéroe para tu cara. Al igual que una capa ayuda a los superhéroes a estar seguros y ocultos, una máscara ayuda a mantener tu nariz y boca seguras al cubrirlas. Atrapa pequeñas gotas de tu aliento para que no vuelen y ayuda a mantener los gérmenes lejos de ti y de los demás.
Piensa en una máscara como una manta acogedora para tu cara. Cuando hace frío, te envuelves en una manta para mantenerte caliente. Una máscara se envuelve alrededor de tu cara para mantenerla segura y protegida de los gérmenes. Es como darle un abrazo cálido a tu cara.
Las máscaras son como un escudo mágico. Imagina que eres un caballero con un escudo brillante que te protege de los dragones. Una máscara es tu escudo contra gérmenes invisibles que intentan enfermarte. Cuando la usas, eres como un caballero listo para enfrentar el día.
Una máscara también es como un guardián de secretos. Cuando hablas, mantiene tus palabras cerca de ti, al igual que un amigo guarda secretos. Ayuda a asegurarse de que solo las personas cercanas a ti puedan escucharte claramente.