Una mentira es como cuando pintas un cuadro de un día soleado, pero en realidad está lloviendo afuera. Es decirle a alguien algo que no es verdad. Imagina que tienes una caja de crayones y le dices a tu amigo que tienes un crayón mágico que puede dibujar solo. Pero en realidad, es solo un crayón normal. Eso es una mentira porque no estás diciendo la verdad sobre el crayón.
Piensa en una mentira como una pequeña historia que inventas en tu cabeza. Es como fingir ser un superhéroe con poderes cuando en realidad no los tienes. Podrías hacer esto para hacer feliz a alguien o para evitar problemas, pero aún así no es real. Decir la verdad es como mostrar tu verdadero yo, al igual que cuando te quitas un disfraz después de Halloween.
Una mentira puede ser como una burbuja que soplas. Parece bonita y brillante, pero puede estallar fácilmente, y entonces todos pueden ver que no era real. Las mentiras pueden hacer que las personas se sientan tristes o confundidas porque no saben qué es verdad. Siempre es mejor mantener tus palabras como un puente fuerte y seguro por el que la gente pueda caminar con confianza.