tapa
Una tapa es como una manta acogedora para tu taza. Cuando tienes una taza de chocolate caliente, la tapa se sienta encima para mantenerla caliente y segura, al igual que tu manta te mantiene caliente por la noche. Se asegura de que nada se derrame, para que puedas llevar tu bebida a donde quieras sin hacer un desastre.
Piensa en una tapa como una capa de superhéroe para tu tarro de galletas. Cubre la parte superior para que ninguna miga traviesa pueda escapar y ninguna hormiga molesta pueda entrar. Al igual que un superhéroe protege la ciudad, una tapa protege tus bocadillos y los mantiene frescos y deliciosos.
Una tapa también es como un sombrero para tu caja de juguetes. Se sienta encima para mantener todos tus juguetes bien guardados dentro. Si quieres jugar, solo tienes que quitar la tapa, y cuando termines, la vuelves a poner para que todo quede ordenado. Así que, una tapa ayuda a mantener las cosas en su lugar, al igual que un sombrero mantiene tu cabeza caliente y cómoda.