dejar
Dejar es como cuando estás jugando en el arenero y es hora de ir a casa. Tienes que dejar de jugar y despedirte de tus amigos. Puede que te sientas un poco triste, pero sabes que volverás otro día.
Piensa en tu juguete favorito como una nave espacial. Cuando te vas, es como si tu nave espacial estuviera lista para despegar hacia una nueva aventura. Puede que no sepas lo que encontrarás, pero será emocionante. Dejar puede ser así, una oportunidad para explorar algo nuevo.
Piensa en un cuento antes de dormir. Cuando termina la historia, tienes que cerrar el libro e ir a dormir, pero sabes que habrá otra historia mañana. Dejar es como eso, cerrar un capítulo para poder comenzar uno nuevo.
Dejar también es como cuando un pájaro vuela de un árbol a otro. Deja el árbol, pero encuentra un nuevo lugar para posarse. Puedes dejar un lugar, pero puedes encontrar nuevos lugares y personas para disfrutar.