Piensa en una bombilla. Cuando está encendida, brilla intensamente, haciendo que la habitación sea cálida y feliz. Si la apagas, la luz desaparece y la habitación se vuelve oscura y silenciosa. ‘Matar’ significa apagar la luz para siempre, de modo que la bombilla no pueda volver a brillar. Es como cuando un juguete deja de funcionar y no se puede arreglar.
Imagina una flor en el jardín. Se alza alta, colorida y bonita. Pero si la arrancas de raíz, no puede crecer ni florecer de nuevo. Eso es lo que significa ‘matar’ para los seres vivos; dejan de crecer y no pueden volver a la vida.
Piensa en tu dibujo animado favorito. Los personajes son animados y llenos de diversión. Pero si el programa termina para siempre, no puedes verlos jugar o reír más. ‘Matar’ significa terminar algo para que no regrese.
Considera un juego de computadora. Cuando juegas, hay vidas en el juego. Si pierdes todas tus vidas, el juego se detiene y no puedes jugar esa ronda más. ‘Matar’ es como perder todas las oportunidades en un juego, donde comenzar de nuevo no es posible.