Un chiste es como una sorpresa divertida que escuchas con tus oídos y sientes con tu corazón. Imagina que tienes una caja y cuando la abres, un payaso tonto salta y te hace reír. Eso es lo que hace un chiste, pero con palabras. Es una pequeña historia o una pregunta que termina con algo inesperado que te hace reír.
Piensa en un chiste como una cosquilla para tu cerebro. Al igual que cuando alguien te hace cosquillas y no puedes evitar reírte, un chiste cosquillea tus pensamientos. Puede darle la vuelta a las cosas o hacerte ver algo ordinario de una manera divertida, y eso te hace sonreír o reír a carcajadas.
Un chiste también es como un juego. Es un juego donde la persona que cuenta el chiste conoce un secreto, y cuando te lo cuenta, tú también descubres el secreto. La parte divertida es cuando el secreto es algo que no esperabas, como una fiesta sorpresa en tu mente. Por eso los chistes son divertidos para compartir con amigos, porque a todos les gusta una buena sorpresa que los haga felices.