Ser invisible es como ser un superhéroe con un poder especial donde nadie puede verte, incluso si estás justo enfrente de ellos. Es como jugar al escondite y eres tan bueno escondiéndote que es como si ni siquiera estuvieras allí. Cuando eres invisible, es como usar una capa mágica que te hace desaparecer de la vista.
Piensa en una ventana transparente. Puedes ver a través de ella, pero no puedes ver el vidrio en sí a menos que lo toques o algo se refleje en él. Eso es como ser invisible. Estás ahí, pero nadie puede verte a menos que ocurra algo especial, como que hagas un ruido o muevas algo.
O piensa en el viento. No puedes ver el viento soplando afuera, pero sabes que está ahí porque lo sientes en tu cara y ves las hojas moverse. Ser invisible es como ser el viento—estás ahí, pero nadie puede verte. Es una idea divertida porque puedes imaginar hacer todo tipo de cosas sigilosas y juguetonas sin que nadie lo note!