La palabra introducción es como la primera página de un libro de cuentos. Es cuando conoces nuevos personajes y aprendes un poco sobre de qué tratará la historia. Cuando te presentas a alguien, eres como esa primera página, diciéndoles tu nombre y un poco sobre quién eres.
Piensa en una introducción como el comienzo de un juego divertido. Antes de jugar, todos necesitan conocer las reglas. De la misma manera, cuando te presentas, le dices a la gente lo básico para que sepan con quién están hablando, al igual que aprender las reglas te ayuda a entender el juego.
Imagina una caja de crayones. Cada crayón es de un color diferente, y cuando abres la caja, ves todos los colores por primera vez. Una introducción es como abrir esa caja y descubrir todas las posibilidades dentro. Es el comienzo de algo nuevo y emocionante, como dibujar un cuadro con esos crayones.
Una introducción también es como plantar una semilla. Cuando conoces a alguien nuevo, plantas la primera semilla de la amistad. Con el tiempo, con cuidado y atención, esa semilla puede crecer en un gran y hermoso árbol de amistad, lleno de diversión y risas.