Un incentivo es como cuando recibes una pegatina brillante por recoger tus juguetes. La pegatina es una recompensa que te hace querer recoger de nuevo la próxima vez. Es algo que te hace sentir feliz o emocionado por hacer algo bueno. Imagina que tienes un tarro de galletas. Si terminas tus deberes, obtienes una galleta. La galleta es un incentivo porque te hace querer terminar tus deberes más rápido.

Piensa en un juego donde recolectas estrellas. Cada vez que haces algo bueno, recibes una estrella. Después de recolectar cinco estrellas, obtienes un juguete nuevo. Las estrellas son incentivos porque te hacen querer seguir haciendo cosas buenas. Es como un pequeño empujón que te ayuda a tomar buenas decisiones.

Es como cuando tu maestro dice que tendrás tiempo extra de juego si escuchas bien en clase. El tiempo extra de juego es un incentivo porque te anima a escuchar mejor. Los incentivos son como pequeños ayudantes que te guían para dar lo mejor de ti al darte algo especial a cambio.