El corazón es como una bomba súper importante dentro de tu cuerpo. Imagínalo como un pequeño motor que mantiene todo funcionando sin problemas. Trabaja todo el tiempo, incluso cuando duermes, para asegurarse de que tu cuerpo reciba la sangre que necesita. La sangre es como un jugo especial que lleva oxígeno y nutrientes a cada parte de ti, ayudándote a crecer y mantenerte saludable.
Piensa en tu corazón como un tambor amigable que late en tu pecho. Cada vez que late, envía un flujo de sangre por todo tu cuerpo. Este latido se llama tu latido del corazón. Puedes sentirlo si pones tu mano en tu pecho. Es como la música de tu cuerpo, tocando una canción que nunca se detiene.
Tu corazón también es como un controlador de tráfico. Se asegura de que la sangre vaya a los lugares correctos en el momento adecuado. Cuando corres, late más rápido para enviar más sangre a tus músculos. Cuando descansas, se ralentiza. Siempre está trabajando para que te sientas lo mejor posible. ¡El corazón es realmente asombroso, cuidándote cada día!