La palabra ‘él’ es como un nombre especial que usamos para los niños o los hombres cuando hablamos de ellos. Es como una capa de superhéroe que solo los niños pueden usar. Cuando ves a alguien usando esta capa, sabes que es un niño o un hombre. Entonces, si ves a tu amigo Timmy y quieres decir algo sobre él, puedes decir: ‘Él está jugando con sus juguetes.’ Es como darle a Timmy su nombre de superhéroe sin decir Timmy cada vez.
Piensa en un rompecabezas donde cada pieza tiene una forma especial. La pieza con forma de triángulo es para los niños, y la llamamos ‘él’. Cuando colocas la pieza triangular en su lugar, encaja perfectamente, al igual que cuando usas ‘él’ para hablar de un niño. Esto ayuda a todos a entender de quién estás hablando sin confusión.
Piensa en ‘él’ como una palabra mágica. Cuando la usas, todos saben que estás hablando de un niño o un hombre. Es como una varita mágica que señala a la persona correcta. Así que si dices: ‘Él está comiendo una manzana’, todos saben que estás hablando de un niño que está disfrutando de su merienda. ¡Esta palabra mágica hace que hablar de personas sea fácil y divertido!