franco
Ser franco es como cuando le dices a alguien exactamente lo que sientes, como cuando pruebas un limón y dices que es muy ácido. No finges que es dulce, simplemente dices lo que realmente piensas. Imagina que un amigo te pregunta si te gusta su dibujo, y tú dices: ‘Me gustan los colores, pero creo que las líneas podrían ser más rectas.’ Eso es ser franco porque estás siendo honesto sobre lo que piensas.
Piensa en una persona franca como una ventana clara. Puedes ver a través de ella, y no hay nada oculto. Cuando alguien es franco, es como si te mostrara su verdadero yo sin cortinas ni coberturas. Es como cuando estás jugando un juego y alguien te dice las reglas de inmediato, para que no haya sorpresas.
Ser franco también es como tener una linterna en una habitación oscura. Te ayuda a ver las cosas claramente. Cuando eres franco, ayudas a otras personas a entender lo que realmente está pasando. Es como decirle a tu mamá que rompiste el jarrón en lugar de decir que no sabes qué pasó. Se trata de ser honesto y claro.