pronóstico
Un pronóstico es como una bola de cristal mágica que nos ayuda a adivinar qué podría pasar en el futuro. Si quieres saber si lloverá mañana para decidir si debes ponerte tus botas de lluvia, el pronóstico del tiempo es como un ayudante especial que te dice: ‘¡Oye, podría llover mañana, así que tal vez ponte esas botas!’ No siempre acierta, pero te da una buena idea de lo que podría pasar.
Piensa en un pronóstico como un mapa del tesoro. Cuando tienes un mapa del tesoro, te muestra dónde podría estar el tesoro, pero aún tienes que caminar por el camino y ver si realmente está allí. Un pronóstico nos muestra lo que podría pasar, como si hará sol o lloverá, pero tenemos que esperar y ver si realmente sucede.
Un pronóstico también es como una receta. Cuando haces galletas, sigues una receta que te dice a qué podrían saber las galletas. Pero a veces, pueden saber un poco diferente. Un pronóstico nos dice cómo podría ser el clima, pero puede cambiar un poco, al igual que las galletas pueden saber un poco diferente cada vez que las haces.