Cuando piensas en “volar”, es como ser un superhéroe que puede surcar el cielo. Así como los pájaros baten sus alas para moverse hacia arriba y hacia abajo, una mosca usa sus alas para moverse por el aire. Imagina la sensación de balancearse alto en un columpio; eso es un poco como lo que se siente al volar. Subes, subes, y luego bajas, moviéndote por el aire con facilidad.
Volar también es como ser una hoja mágica que flota en el viento. ¿Alguna vez has visto una hoja girar y bailar al caer de un árbol? Una mosca hace lo mismo pero puede controlar a dónde va. Si alguna vez has visto una mariposa revolotear, ese es otro ejemplo de volar. Se mueve suavemente y con gracia, eligiendo a dónde ir después, al igual que una mosca.
Finalmente, volar es como ser un pequeño avión. Así como los aviones atraviesan el cielo, una mosca puede moverse rápidamente. Puede ir hacia arriba, hacia abajo, hacia la izquierda o hacia la derecha, casi como si estuviera jugando al escondite en el cielo. Entonces, volar es moverse por el aire, como un superhéroe, una hoja mágica o un pequeño avión.