Un flotante es como un número mágico que puede tener un punto, al igual que un globo puede flotar en el aire. Imagina que tienes un frasco de caramelos de gelatina, y quieres contarlos, pero algunos de ellos están cortados por la mitad. Un flotante te ayuda a contar esos caramelos a la mitad, para que sepas exactamente cuántos tienes, incluso si no son enteros.
Piensa en un flotante como un superhéroe que puede manejar tanto números enteros como partes de números. Al igual que un superhéroe puede volar alto y bajo, un flotante puede ayudarte con números que tienen pequeñas partes, como 3.14 o 7.5. Es como tener una regla que puede medir no solo pulgadas enteras, sino también pequeñas partes de una pulgada, para que puedas medir las cosas con más precisión.
Otra forma de ver un flotante es como una pizza que se puede cortar en muchos pedazos. Si tienes una pizza y comes dos y media rebanadas, un flotante te ayuda a recordar que comiste 2.5 rebanadas, no solo 2 o 3. De esta manera, sabes exactamente cuánta pizza te queda.