Piensa en tu juguete favorito con el que te encanta jugar. La exportación es como cuando compartes ese juguete con un amigo que vive lejos. Lo empaquetas bien y se lo envías para que él también pueda disfrutarlo. Esto es lo que sucede cuando los países envían cosas que fabrican a otros países. Comparten sus juguetes especiales, como coches o manzanas, con personas que viven lejos.
Imagina que tienes una gran caja de crayones con muchos colores. Tienes tantos que decides dar algunos a un amigo que no tiene ninguno. La exportación es como darle esos crayones a tu amigo. Tu amigo ahora puede dibujar y colorear con ellos, y podría incluso darte una tarjeta de agradecimiento a cambio. Los países también hacen esto; envían cosas que tienen en abundancia a otros países y a veces reciben algo a cambio.
Piensa en un delicioso pastel que horneaste con tu familia. Tienes tanto pastel que no puedes comerlo todo tú solo. La exportación es como cortar una rebanada y dársela a tu vecino. Ellos pueden probar tu delicioso pastel, y eso los hace felices. Los países hacen esto con las cosas que fabrican o cultivan, como pan o plátanos, y las comparten con otros lugares.