La ética es como un libro de reglas especial para la vida que nos ayuda a saber la diferencia entre lo que está bien y lo que está mal. Imagina jugar un juego donde todos deben seguir las reglas para que sea divertido y justo para todos. La ética es como esas reglas, pero para cómo tratamos a las personas y animales, y cómo debemos comportarnos. Cuando seguimos la ética, nos aseguramos de ser amables y justos con todos a nuestro alrededor.
Piensa en la ética como una brújula que nos muestra el camino correcto a seguir. Así como una brújula ayuda a los exploradores a encontrar su camino, la ética nos ayuda a tomar buenas decisiones. Cuando tienes que tomar una decisión, la ética te ayuda a elegir el camino que no lastima a los demás y te hace sentir bien por dentro. Es como tener una pequeña voz en tu cabeza que susurra: ‘Esto es lo correcto’.
La ética también es como un jardín. Cuando plantamos semillas de amabilidad y justicia, cultivamos un hermoso jardín de confianza y felicidad con nuestros amigos y familia. Pero si no seguimos la ética, es como plantar malas hierbas que pueden hacer que el jardín esté desordenado y triste. Así, la ética nos ayuda a crear un mundo feliz y saludable asegurándonos de cuidar a los demás y a nuestro entorno.