Cuando respaldas algo, es como dar un gran pulgar hacia arriba para mostrar que realmente te gusta o estás de acuerdo con ello. Imagina que tienes un juguete favorito y le cuentas a todos lo increíble que es. Estás respaldando ese juguete al decir que es el mejor y que otros deberían probarlo también.
Otra forma de pensar en respaldar es como ser un animador para un equipo. Cuando animas a tu equipo, estás mostrando apoyo y diciendo: ‘¡Creo en ustedes!’ Estás respaldando al equipo, ayudando a otros a ver lo genial que es.
Respaldar también puede ser como cuando un profesor te da una estrella dorada en tu tarea. Esa estrella dorada es una forma de decir: ‘¡Buen trabajo!’ El profesor está respaldando tu esfuerzo y mostrando a otros que lo hiciste bien.
Por último, imagina a un superhéroe con una insignia que dice ‘¡Aprobado por el superhéroe!’ Si al superhéroe le gusta algo, lo respalda usando esa insignia. Significa que confía en ello y quiere que otros sepan que también es bueno.
Entonces, cuando respaldas algo, le estás dando tu sello de aprobación, como decir ‘¡Sí, creo que esto es genial!’