codo
El codo es como una bisagra en una puerta que ayuda a abrirla y cerrarla. Así como una puerta necesita una bisagra para moverse, tu codo ayuda a que tu brazo se doble y se enderece. Cuando quieres comer tu merienda favorita, tu codo se dobla para que puedas llevar la comida a tu boca. ¡Es como magia, pero todo gracias a tu codo!
Piensa en el codo como un semáforo en tu brazo. Cuando quieres detener el movimiento de tu brazo, se mantiene recto como una luz roja. Cuando quieres avanzar, se dobla como una luz verde, permitiendo que tu brazo se mueva libremente. ¡Esto hace que jugar, dibujar e incluso saludar a un amigo sea súper divertido y fácil!
El codo es también como un puente que conecta dos partes de una carretera. Tu brazo superior y tu antebrazo son como dos carreteras, y el codo es el puente que permite que los coches (o tus músculos) viajen suavemente de un lado a otro. Sin este puente especial, tu brazo no podría moverse tan libremente, y hacer cosas como lanzar una pelota o abrazar un osito de peluche sería mucho más difícil.