Cuando juegas con tus bloques, a veces tienes que parar y guardarlos. Esto es como un ‘despido’. Es cuando terminas algo que estás haciendo y te preparas para hacer otra cosa. Al igual que cuando un maestro dice que es hora de detener una actividad e ir a casa, eso también es un despido.
Imagina que estás en un parque infantil y es hora de ir a casa. Podrías sentirte un poco triste porque te estabas divirtiendo, pero sabes que volverás otro día. Esto es como un despido porque dejas un lugar divertido para ir a otro, como tu acogedora casa.
Piensa en un libro de cuentos. Cuando llegas a la última página, es hora de cerrar el libro. Podrías sentirte un poco triste porque la historia ha terminado, pero siempre puedes leerla de nuevo. Esto también es una especie de despido, donde terminas una cosa y quizás comienzas una nueva aventura.
El despido es como decir adiós por ahora, pero sabiendo que pronto volverás a decir hola. Es una pausa, no un final, al igual que cuando pausas un juego y puedes jugarlo de nuevo más tarde.